He perdido la cabeza

He perdido la cabeza
-He perdido la cabeza -Eso me temo,estás loco,chalado,majareta...Pero te diré una cosa, las mejores personas lo están

viernes, 10 de junio de 2011

Pájaros de papel

Había una vez una niña que se dedicaba a tirar por la ventana pajaritos de papel.
-¿Por qué lo haces?- le preguntó su madre un día.
-Quiero verlos volar-respondió con los ojos brillantes.
Pasó un tiempo, y la niña seguía tirando pájaritos de papel.
-¿Por qué lo haces?- volvieron a preguntarle.
-Quiero verlos volar.
-Los pájaros de papel no vuelan, hija.
De su ventana, no volvieron a caer más figuritas de origami.




miércoles, 8 de junio de 2011

Origami

Empezaba a sonar Beethoven cuando hizo la primera doblez en el papel.
Sus dedos se deslizaban sobre la superficie,  lentos, como en trance, mientras sonaba la música.
Por la ventana entraban los últimos rayos de sol,  iluminando la habitación con una luz rojiza.
Ella seguía doblando, sentada sobre la cama. En el suelo, el tocadiscos seguía girando, la música se aceleraba.
Dobló, apretó con las uñas, y el papel se rasgó. Se quedó mirando, en silencio, con el rostro inexpresivo, el pájaro roto. Lo tiró al suelo, y volvió a empezar.
Los cadáveres blancos de sus anteriores intentos llenaban el suelo, como una alfombra.
Empezó desde cero, y de nuevo salió mal.
La canción volvió a repetirse, por decimonovena vez.
La mirada de la chica estaba fija en el papel, y sus dedos más ágiles ahora se movían como si estuviesen poseídos por los pasos que debía seguir.
Dobla, dobla, dobla...
El pájaro estuba acabado.
Los sostuvo entre sus dedos, girándolo, mirándolo a trasluz.
Se levantó con la figurita en las manos y se dirigió al baño.
Abrió el grifo de la bañera y se sentó en el suelo. Esperó a que el agua cubriera todo el plato y después colocó el pequeño origami dentro.
Se quedó quieta unos instantes, mirando como se iba deshaciendo, arrastrado por la corriente hacia el desagüe, hasta quedar reducido a unos restos de papel mojado. Entonces cerró el grifo, cogió el cuerpo deshecho del cisne y salió del baño, descalza.
En el tocadiscos, la sonata se repetía de nuevo.