A su espalda, las huellas se perdían en la distancia.
Llevaba horas caminando sobre la arena mojada, con la lluvia cayendo sobre sus hombros desnudos.
Un paso tras otro, con la mirada perdida en algún punto de horizonte que solo ella podía ver, sin volver jamás la vista atrás.
Ante mis ojos, la vi desvanecerse en la distancia.
Llevaba horas quieto sobre la arena mojada, con el pelo empapado pegado a la frente y la ropa encharcada.
Gota a gota, con los ojos fjos en la arena, vi como la lluvia borraba sus pasos, alejándola de mí.
Siempre un paso más.
Llevaba horas caminando sobre la arena mojada, con la lluvia cayendo sobre sus hombros desnudos.
Un paso tras otro, con la mirada perdida en algún punto de horizonte que solo ella podía ver, sin volver jamás la vista atrás.
Ante mis ojos, la vi desvanecerse en la distancia.
Llevaba horas quieto sobre la arena mojada, con el pelo empapado pegado a la frente y la ropa encharcada.
Gota a gota, con los ojos fjos en la arena, vi como la lluvia borraba sus pasos, alejándola de mí.
Siempre un paso más.

Este obra de Pilar Hernández está bajo una licencia Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.
Jo :( qué lastimica!
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